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![]() AKATHISTO A SAN GABRIEL “LOCO EN CRISTO” DE GEORGIA
Kondakion 1
Monje perfecto y loco en Cristo de nuestros tiempos,* igual a los santos monjes de la antigüedad, * y testigo de la fe verdadera sobre la tierra de los vivos, * tú has venido al mundo en la patria de santa Nino, * siendo por mucho tiempo desconocido a los ojos de los cristianos de este siglo, * pero en la actualidad el mundo ortodoxo en su conjunto te conoce, te venera y te exclama con reconocimiento: ¡Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia! Ikos 1 Tú fuiste un niño inteligente y tranquilo que nació en tiempos de persecución, * cuando las hordas de secuaces de la estrella sangrante, * intentaban erradicar la fe cristiana. * Dios hizo don de tu alma piadosa en la Georgia martirizada, * para dar un signo de esperanza en la noche soviética. * Por tu andadura y el testimonio de tu vida, suscitas la admiración de los ortodoxos que te claman: Alégrate piadoso hijo de Santa Nino Alégrate luminaria de Georgia. Alégrate levantamiento de su Iglesia. Alégrate alba de su resurrección. Alégrate borne sobre el camino al Cielo. Alégrate amigo fiel del Señor. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakio 2 Las iglesias de Georgia estaban vacías de sus fieles y destruidas, * los sacerdotes, los monjes y las monjas perecían a golpes de los impíos, * pero en el secreto de su alma, el pueblo fiel de hijos espirituales de santa Nino, * cantaba al Dios Todopoderoso: ¡Aleluya! Ikos 2 Tu padre fue asesinado cuando no tenías más que dos años, * entonces nuestro Padre Celestial te cogió bajo Su protección, * e iluminó tu camino desde el Gólgota hasta el Jardín de la Resurrección. * Desde la niñez fuiste protegido por Su condescendiente misericordia * y nosotros te clamamos: Alégrate arbolillo plantado en el Edén. Alégrate tú que tuviste la Celestial protección. Alégrate juventud consagrada a Dios. Alégrate tú que creciste sin cesar en la fe. Alégrate verdadero tesoro de bendiciones. Alégrate modelo de los nuevos creyentes. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 3 De niño construías pequeñas iglesias que iluminabas con cerillas. * Tu piedad inquietaba a tu madre que temía despertar la hostilidad de los ateos, * que reprimían entonces todo signo de creencia. * Levantaste simbólicamente la Iglesia oprimida cantando a Dios: ¡Aleluya! Ikos 3 Cuando comenzaste a ir al colegio a la edad de seis años, * fuiste un ejemplo y tu amabilidad te hizo ser amado por todos. * A los siete años, al haber oído hablar del libro del Evangelio, * ahorraste para hacerte con él, * y cuando estuvo en tu posesión leíste sin cesar día y noche. * Y nosotros maravillados por tu joven piedad te cantamos: Alégrate icono de la Vida en Cristo. Alégrate tabernáculo del Evangelio. Alégrate atril de la Santa Escritura. Alégrate cirio en la Increada Luz. Alégrate incensario de pura oración. Alégrate bella página del Sinaxario. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 4 Mostrabas una inmensa amabilidad respecto a toda criatura de Dios, * no permitiste que las trampas colocadas acabasen con las pequeñas criaturas hechas por la mano del Señor. * Las atrapabas vivas y las dejabas en libertad. * Siendo todavía un niño recuperaste el buen olor del Paraíso que poseyó Adán. * Las aves del cielo se posaban sobre ti y cantaban, * mientras que tú clamabas a Dios: ¡Aleluya! Kondakion 4 Leyendo el Evangelio sin cesar, * resolviste en tu joven corazón lleno de amor, de no vivir más que por Cristo nuestro Dios, * y consagraste todo tu tiempo libre a la piadosa lectura del Libro de la Vida, * y a una larga oración ardiente en el rincón de los iconos. * Es por eso que te alabamos diciendo: Alégrate renunciación al mundo banal. Alégrate consagración total al Maestro. Alégrate arraigamiento en el Cielo. Alégrate oración incesante del corazón. Alégrate encarnación de la virtud. Alégrate caminante sobre el camino de Cristo. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 5 Un día, una voz en ti te demandó mirar al Cielo. * Cuando elevaste tus ojos viste una gran Cruz. * Comprendiste que esa era la Cruz ibas a cargar por amor a Cristo, * y por el pueblo de Georgia sufriente bajo incesantes persecuciones. * Agradeces a Dios y le cantas: ¡Aleluya! Ikos 5 Otro día mientras dormías fuiste repentinamente despertado, * y viste un demonio de rostro espantoso ante ti. * Él te miraba con ojos llenos de odio. * Tú no te asustaste porque la Gracia de Dios moraba en tí, * pero el demonio te golpeaba reprochándote batirte con él. * Tu madre te encontró sin conocimiento, pero tu fe en Cristo te salvó, * y desde entonces creciste en fuerza espiritual, * es por eso que te clamamos: Alégrate tú que no temiste al Demonio. Alégrate tú que tuviste por escudo la Gracia del Señor. Alégrate tú que no desdeñaste el combate. Alégrate coraje invencible de los santos. Alégrate bella audacia de los confesores. Alégrate coraje de los hijos de Dios. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 6 Tu piedad era conocida por todos y la gente te hacía llamar en sus angustias. * Durante la guerra te iban a visitar, * para tener noticias de aquellos que estaban en el frente. * Entonces recomendaste a aquellos que te consultaban de rezar y la iglesia no dejar de frecuentar. * Y tú les tranquilizabas porque siempre acertabas en lo que decías. * Por lo que cantaban hacia Dios: ¡Aleluya! Ikos 6 Un día convertiste a tu tío Giorgi, al que se le apodaba el “Roble” por su gran fuerza sin igual, * demandándole levantar una pesada roca, cerca de la iglesia de san Jorge que había sido destruida. * Dicha tarea no pudo realizar a pesar de todos sus esfuerzos, * tú lo hiciste tras haber invocado a Cristo, lo que provocó su admiración, * y le hizo volver a la fe de los Padres diciendo: Alégrate manantial de milagros divinos. Alégrate misionero por tu ejemplo. Alégrate confianza inalterable en Cristo. Alégrate creencia en Su gran Poder. Alégrate piadoso canal entre el Cielo y la tierra. Alégrate taumaturgo de Santísimo Nombre. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 7 A causa de duras persecuciones de los discípulos soviéticos de Satanás, *la gente tenía miedo de guardar sus iconos,* tú ibas a ver a aquellos que no los respetaban,* y les sorprendías diciéndoles donde se encontraban escondidos en sus casas, *y les pedías que te los confiaran diciéndoles,* que se los devolverías si lo deseaban.* Participaste así en la salvaguarda de numerosos iconos cantando a Dios: ¡Aleluya! Ikos 7 Fue a la edad de doce años cuando mostraste tu determinación de vivir sólo por Cristo.* Tu madre, teniendo miedo de los viles actos de las autoridades impías,*te ordenó de vivir de una forma menos piadosa.*pero te opusiste y un día ella tiró tu Evangelio.*Tu la reprendiste y abandonaste tu casa para seguir la Vía cristiana,*y maravillados por tu determinación te clamamos: Alégrate combatiente de justo combate. Alégrate porque nunca desertarás. Alégrate perseverancia de los elegidos. Alégrate tú que tuviste tu alma siempre en el Cielo. Alégrate tú que tuviste tu corazón en el Señor. Alégrate tú que tuviste tu espíritu residiendo en Dios. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 8 Caminando día y noche, ibas a Mskheta, al convento de Samtavro.* Pero la higumena Anousia, que te había recibido con gran amor,* no podía recibirte en un monasterio de monjas.* Entonces te mandó al monasterio del Pilar de la Vida.* Antes de visitar el monasterio tu rezaste al icono milagroso de la Portaitisa (Iverskaya). * Y agradeciste a Dios diciéndole: ¡Aleluya! Ikos 8 Residiste algunos días en el monasterio del Pilar de la Vida, *pero no pudiste permanecer y partiste para Shio-Mghvime, y después para Zedazeni.* Allí los monjes te ocultaron un tiempo y después te enviaron al monasterio de Betania,* donde vivían los dos monjes Jorge y Juan, que se convirtieron en tus Padres en la fe, *y que la Iglesia glorifica como santos. *Por lo que admirados por tu santa determinación te cantamos: Alégrate perseverancia en la fe. Alégrate libre esclavo del Dios de Amor. Alégrate discípulo perfecto del Señor. Alégrate búsqueda del remanso celestial. Alégrate joven compañero de los dos santos. Alégrate monje en los tormentos del mundo. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 9 El gobierno ateo decidió arrasar el terreno *donde los soldados georgianos de la guerra de independencia, *habían sido sepultados en la espera de la resurrección. *De noche cogiste los restos de aquellos que habían perecido por la patria georgiana, *y les diste una sepultura cristiana decente cantando: ¡Aleluya! Ikos 9 Habiendo tenido conocimiento de tu visión sobre el demonio,* las autoridades te convocaron, te examinaron y te declararon “enfermo mental”.* Es entonces cuando construiste una pequeña vivienda en el terreno de la casa de tu madre,* y continuaste con tus actividades espirituales.* Te convertiste en el guardián de la catedral de Sion, *y pronto fuiste ordenado diácono, *pronunciando tus votos monásticos antes de llegar a ser sacerdote.* Reconociendo tu gran dignidad por esta misión, te clamamos: Alégrate tú que tuviste una gran sabiduría venida de Dios. Alégrate tú a quien el mundo declara “loco”. Alégrate tú que portaste una locura divina. Alégrate espejo fiel del Evangelio. Alégrate puro haz de Luz del otro Sol. Alégrate reflejo de la Gracia de lo Alto. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 10 Serviste en el monasterio de Betania,* y cuando fue cerrado, tú volviste a Tbilissi* y construiste una iglesia en el terreno de tu casa. *Fue numerosas veces destruida,* pero tú la reconstruiste cada vez sin desalentarte. *Clamando a Dios: ¡Aleluya! Ikos 10 Un día mientras los secuaces del ateísmo militante celebraban el primero de mayo, *tú prendiste fuego a un inmenso retrato de aquel, *cuya momia pútrida desfigura la Plaza Roja. *Fuiste linchado por los sin-Dios,* y no escapaste a la muerte más que por la gran Misericordia de Dios.* Los poderes soviéticos aseguraban que estabas loco,* porque a pesar de las torturas continuabas diciendo:* “La gloria no es necesaria para ese muerto, sino la Gloria para Cristo”.* Ante tu coraje insigne y tu fe invencible, te alabamos así: Alégrate tú que te enfrentaste al dragón rojo. Alégrate tú que quemaste su retrato infame. Alégrate destructor de los ídolos vanos. Alégrate tú que no temiste por tu vida. Alégrate tú que sin temor das testimonio de Cristo. Alégrate ejemplo de coraje en Dios. Alégrate san Gabriel de Georgía. Kondakon 11 Desde entonces, cogiste en ti la pesada ascesis de la locura en Cristo,* Considerado como loco predicaste en las calles,* simulando la embriaguez actuabas como todos los locos en Cristo,* mostrando por tu comportamiento que la sabiduría de este mundo es locura a los ojos de Dios,* y que la Locura de Dios es más sabia que la de los hombres.* Tras eso fuiste nombrado sacerdote en el convento de Samtavro.* Y continuaste alabando al Señor diciendo: ¡Aleluya! Ikos 11 Durante dieciocho años hiciste un gran peregrinaje por todos los monasterios e iglesias destruidos por los impíos,* anunciando a los fieles que todo sería reconstruido un día.* Quisiste a continuación vivir en una ermita en Shio-Mghvime,* pero una voz de lo Alto te ordeno regresar a Samtravo.* Allí rezabas y ayunabas, sufriendo entonces la guerra civil entre los georgianos. *Tú fuiste el recurso en las pruebas de todos y todas, por eso ten cantamos: Alégrate Oh peregrino infatigable. Alégrate amante de los lugares dedicados a Dios. Alégrate profeta de la Santa Iglesia. Alégrate heraldo de la gran piedad. Alégrate mensajero de la Buena Nueva. Alégrate morada del Santísimo Espíritu. Alégrate san Gabriel de Georgia. Kondakion 12 Taumaturgo de Cristo, escondías siempre ese don de la Divina Providencia, *pero no abandonaste a los que venían a ti,* sin socorro en sus pruebas y sin la ayuda de la Gracia de Dios.* Tú predicaste sin cesar el Amor y la humildad;* lo manifestabas sin cesar por la santidad de tu vida ejemplar,* que nos hace alabar a Dios clamándole: ¡Aleluya! Ikos 12 Durante tus últimos años, aceptaste con paciencia la enfermedad y permaneciste en cama, *sin dejar de enseñar a los que te venían a encontrar,* y les ponías en guardia contra los terribles tiempos que vendrían.* Y el día precedente de tu bienaventurado nacimiento al Cielo, *diste tus últimas instrucciones diciendo a los visitantes: *“el tiempo ha venido para mi partida”.* Entonces acariciando al icono bendito del Salvador de los hombres, añadiste: *“Te sigo, Oh Cristo mío, desde la temprana edad de doce años. Estoy preparado, llévame”. *Y cuando el arzobispo Daniel hubo terminado de leer las oraciones de los agonizantes, *sonreíste y rendiste a Dios tu alma benigna. *Y los ángeles y los santos del Cielo cantaron: Alégrate atleta victorioso de Cristo. Alégrate vencedor del combate de la ascesis. Alégrate ejemplo viviente de la Gracia. Alégrate escudo contra el enemigo. Alégrate tú que fuiste coronado por el Maestro. Alégrate gloria de todos los locos en Cristo. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 13 Desde entonces, tu tumba, como un relicario sagrado, es lugar de peregrinaje de los peregrinos de este mundo. *El aceite de tu lámpara es un bálsamo beneficioso que sana las enfermedades de los fieles,* y como un manantial vivificante de incontables prodigios y milagros, *contribuyen a exaltar el poder beneficioso de nuestro Dios,* y la revelación de tu altura entre los Santos, *tú que fuiste Su servidor fiel desde tu infancia y hasta la muerte, *siempre clamando a Dios desde Su Trono en la Gloria: Aleluya, aleluya, aleluya. (se repite tres veces el kondakion 13) Ikos 1 Tú fuiste un niño inteligente y tranquilo que nació en tiempos de persecución, * cuando las hordas de secuaces de la estrella sangrante, * intentaban erradicar la fe cristiana. * Dios hizo don de tu alma piadosa en la Georgia martirizada, * para dar un signo de esperanza en la noche soviética. * Por tu andadura y el testimonio de tu vida, suscitas la admiración de los ortodoxos que te claman: Alégrate piadoso hijo de Santa Nino Alégrate luminaria de Georgia. Alégrate levantamiento de su Iglesia. Alégrate alba de su resurrección. Alégrate borne sobre el camino al Cielo. Alégrate amigo fiel del Señor. Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia. Kondakion 1 Monje perfecto y loco en Cristo de nuestros tiempos,* igual a los santos monjes de la antigüedad, * y testigo de la fe verdadera sobre la tierra de los vivos, * tú has venido al mundo en la patria de santa Nino, * siendo por mucho tiempo desconocido a los ojos de los cristianos de este siglo, * pero en la actualidad el mundo ortodoxo en su conjunto te conoce, te venera y te exclama con reconocimiento: ¡Alégrate san Gabriel, loco en Cristo de Georgia! Oración a San Gabriel de Georgia. Padre santo y loco en Cristo Gabriel de Georgia, tú que dispensas en un mundo en continua confusión, la Sabiduría de Dios, intercede por nosotros indignos pecadores, que veneramos tu sagrada memoria. Por tus oraciones ante el Trono del Dios Altísimo, junto al cual moras, ayúdanos a permanecer firmes en la fe ortodoxa de nuestros Padres, y a caminar por la Vía de los Mandamientos Divinos. Que tu santo ejemplo nos dé el coraje de vencer las pasiones del mundo, y de guardar la oración como un viático en todo momento. Que tú humildad y tu gran coraje en las pruebas, nos sean el aliento en la ascesis de la vida cristiana. Por tu luminosa vida, muéstranos el camino que lleva a la salud eterna y guárdanos de las embestidas del Maligno. Santo Padre y loco en Cristo Gabriel de Georgia, tú que dispensas en un mundo enturbiado la Sabiduría de Dios, intercede por nosotros indignos, que veneramos tu santa memoria, ante Dios nuestro Señor. Amén. Adaptación al español por hipodiácono Miguel Parra. [cristianoortodoxo] Del original compuesto por Claude Lopez-Ginisty |
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